Café musical

19 mar 2009

Efecto Dominó

Me acuerdo bien cuando fuí a un campeonato de efecto dominó en 1992, en Tijuana. Mi figura era una gran taza de café con todo y el humito (desde esos años ya tenía la idea de poner un café en mi natal Guadalajara). Me tardé como 6 horas en hacer la figurilla, ficha por ficha hasta que la formé, y le puse una trayectoria singular. Era mi turno para tumbar las fichas y formar la figura, y segurote, tumbé las fichas, la taza de café se formó en unos cuantos minutos, preciosa y humeante. Naturalmente, gané el primer premio...

Para festejar, nos fuimos todos los participantes a un maratón de disco. Mi esposa y yo estábamos más que listos para el gran baile. Al mero principio una pareja se cayó al pisarse mutuamente y pues me recordaron al concurso de fichas, unas tras otras fueron cayendo parejas y parejas, entre tropezones, mareos, desmayos y pues simple cansancio. En fin, mi Dianita Cazadora y yo quedamos en 3er lugar...

Al día siguiente, cruzamos a San Diego, a armarnos de ropa y unas cuantas cosas más. Hace poco regresé a Tijuana, una ciudad que visito desde que tenía 10 años, que tiene una maravillosa historia, que recibe a todos los de otros estados y países con los brazos abiertos, un verdadero centro de cultura y arte mayor a la Ciudad de México y Monterrey... Tijuana ha sido asotada con la violencia del narcotráfico, debido a la pelea por la plaza entre los Arellano y todos los demás cárteles de droga. Uno tras otro ha caido como ficha de dominó y aunque la guerra es solo entre ellos, gente inocente a perecido por balas perdidas y simple suerte, por estar en el lugar equivocado y en el tiempo equivocado. Al igual han caído como fichas de dominó policías corruptos, ministeriales metidos hasta el tuétano en la situación y otras cuantas "autoridades" más.

Además de que el problema de la violencia no es solo del ejército, ni de la misma policía, ni de los mismos narcos. Es de los habitantes de la ciudad, desde que inició el boom por cruzar a Estados Unidos, mucha gente se ha quedado a vivir en donde empieza la patria esperando otra oportunidad para brincarse la barda. A pesar de que los que ya tienen tiempo ahí les abren los brazos, ellos responden como mal agradecidos tirando basura por doquier, provocando desórden, y además de que no dan un carajo por la ciudad, la tienen vista como ciudad de paso, porque se van al otro lado, y si se quedan más de 5 años, la siguen viendo como ciudad de paso. Si comprendo el sufrimiento, pero dividen la ciudad, la perjudican en cierto punto. Lo que debería hacer el gobierno es en cuanto sean deportados, que el grupo BETA los mande de regreso a sus lugares de origen. Aunque no hay que generalizar, también, hay bastante gente que va a Tijuana a superarse (que son unas cuantas), le echa ganas, trabaja y trata de que la ciudad se vea mejor, y que salga adelante, al fin y al cabo, EL EFECTO DOMINÓ...

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